Se le rompió el saco de la ambición a Sayco por el cobro del 12.5 y hasta el 25 por ciento a los eventos musicales o del espectáculo, que se realizan las plataformas digitales.
Sayco está hoy en el ojo del huracán y despertó heridas sangrantes por su insolente y temeraria decisión, de cobrar impuesto a los eventos que se realicen vía electrónica.
Sayco es una organización privada que nunca se sabe cuál entidad es la encargada de vigilarla o supervisar, si sus ingresos son realmente entregados en forma justa a los compositores y autores musicales en Colombia.
La decisión temeraria de Sayco es un verdadero autogol de esta organización que ha demostrado al país entero que la ambición rompe el saco, y que el gobierno nacional deberá tomar medidas drásticas para acabar o reestructurar una entidad que ha sido la mayor depredadora de los recursos de pequeños y medianos empresarios del espectáculo.
Esta es una entidad de manejo privado, pero con servicios de policía, por lo cual puede ordenar el cierre de cualquier establecimiento comercial si se atrasa en sus pagos.
Con el 90% de los establecimientos cerrados en todo el país, el debate sobre el pago de los derechos de autor por la utilización de piezas musicales es un tema candente y abre una herida sobre la supervivencia de estos negocios. Y ahora, llega Sayco a echarle sal a esta herida al ordenar cobros por los espectáculos virtuales.
Bares, restaurantes y hoteles, entre otros negocios, presentan múltiples quejas sobre el cobro de este rubro, que desconoce, según aseveran, su condición actual por la emergencia.
