La agremiación pide el desmonte de las medidas para la celebración del primer Día de la Madre.
La Asociación Nacional de Comerciantes FENALCO, rechazó hoy la medida adoptada por los gobiernos locales de imponer durante la celebración del día clásico de las madres, ley seca y toque de queda, medida que se suma al escenario de confinamiento obligatorio impuesto en todo el territorio nacional.
“Hemos acompañado al Gobierno en todas las disposiciones establecidas para mitigar el impacto del virus en el país, bajo la perspectiva de que primero está la salud. Sin embargo, una decisión de esta magnitud en una fecha tan especial para los colombianos, afectará aún más el comercio formal, que ha demostrado seguir al pie de la letra todas las indicaciones y protocolos exigidos por alcaldes y gobernadores”, afirmó Jaime Alberto Cabal Sanclemente, presidente de Fenalco.
Agrega el dirigente que “estas medidas terminan afectando no solo la economía, sino la generación de empleo y el ingreso a los hogares más vulnerables”.
Fenalco en su comunicado recalca que “de acuerdo con un reciente informe de ANIF, es inadecuado que se estén proponiendo medidas, adicionales a las tomadas para contener el virus, como una eventual prohibición total al consumo y venta de bebidas alcohólicas, con el pretexto de reducir los casos de violencia intrafamiliar (como se ha venido argumentando) porque informes oficiales no muestran que, en el período de aislamiento, la violencia intrafamiliar haya aumentado por el consumo de alcohol.
Por el contrario, estas medidas afectan la economía, la generación de empleo e impactarían el recaudo de impuestos de las entidades territoriales que utilizan esa fuente para financiar, precisamente, la atención en salud en sus territorios.
Todo esto, sin mencionar el aumento del licor de contrabando o lo que es peor adulterado, que genera la implementación de esta prohibición.
Para el Director Ejecutivo de Fenalco Antioquia, Carlos Andrés Pineda Osorio, este fin de semana será clave, porque muchas personas aprovecharán, de manera responsable, para el abastecimiento o compra de regalos en almacenes de cadena y comercios abiertos al público, lo que se verá gravemente disminuido no solo con la ley seca, sino con el toque de queda.
