La inauguración de Hidroituango y los discursos de marras

 

¿Las aguas benditas de Hidroituango sanarán tantas heridas?

 

OPINIÓN – Octavio Gómez

Todos se darán cepillo y acapararán titulares de prensa, comenzado por el presidente Iván Duque en la puesta de operación de la primera unidad de generación de Hidroituango el próximo 26 de julio, y bastante provecho que le hará en esta época electoral.

Me imagino su discurso, que no será breve, porque una oportunidad como esta no se presenta todos los días. Y me imagino que se cobrará para si el rescate de los 4 y pico de billones de pesos que se les exigió a las aseguradoras para que pagaran por el siniestro que casi arruina la obra. Duque estaba muy calladito al respecto y si el alcalde no hace ruido y demanda antes de que se vencieran las pólizas, esa platica se hubiera perdido.

Pero la política es así y ganar padrenuestros con indulgencias ajenas es el factor común y allí estarán sacando pecho además del presidente, ministros, empresarios, y hasta la contraloría y demás organismos, que de una u otra manera tuvieron que ver con el proyecto.

A los que sí calculo que se estarán mordiendo las uñas de la rabia o la envidia, son muchos o algunos del llamado Comité Intergremial de Antioquia, cuna de la revocatoria contra el alcalde Daniel Quintero, quienes no creo que se asomen por allí, aplaudiendo la epopeya de ver por fin un proyecto tan sufrido, rindiendo al final sus frutos y beneficios para el país.

¿Y qué decir de los presidenciables Fajardo, Fico y demás camaleónicos personajes de la política que le metieron la mano al proyecto ¿se harán presentes? ¿o no están invitados?

Hidroituango tiene y siempre va a tener dos caras y por ello debería tener dos placas conmemorativas: la del triunfo sobre la corrupción que desató su construcción que al final logró ser contenida por el alcalde Quintero y la de la tenacidad y empeño que puso, para entregar la obra saneada y sin más contratiempos.

Debería servir esta obra para la reconciliación, y los paisas, desde el más humilde hasta el más radical personaje de bien, darse el abrazo fraternal de hermanos, porque Hidroituango no es solo un proyecto, sino la verraquera paisa que luchó no solo contra la naturaleza y sus avatares, sino contra la corrupción de cierta clase dirigente política y empresarial, que siempre busca en las obras públicas su propio beneficio. Mire y verá.

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