El informe presentado por la empresa d consultoría chilena Pöyry, dando cuenta que el proyecto Hidroituango está expuesto a riesgos catastróficos que puede costar muchas vidas y perdidas económicas considerables, debería de servir para que los ciudadanos dejen de ser espectadores neutrales y salgamos de manera contundente, a exigirle a los gobernantes que se vuelvan serios y traten este delicado asunto con transparencia y sin el ánimo de proteger a los responsables del desastre ecológico, ambiental y humano ocurrido en Antioquia.
A los candidatos presidenciales, Sergio Valderrama y Federico Gutiérrez, hay que llamarlos a que rindan cuentas al país por participar o cohonestar con el acto de corrupción más grave de los últimos tiempos. Estos caraduras están recorriendo el país agitando la bandera de la lucha contra la corrupción.
El riesgo de una catástrofe en Hidroituango es real, por tanto, el alcalde Daniel Quintero y el gerente de EPM, deben poner todos los informes técnicos a consideración de los ciudadanos, con el fin de que se pueda promover un debate público y tomar las medidas pertinentes para proteger a los pobladores de la zona de influencia del proyecto.
