EPM inaugura la primera planta de biometano en Colombia

 

Será la primera del país en enriquecimiento de biogás, para inyectarlo a la red de distribución de gas natural en Antioquia

 

Tendrá capacidad de producir hasta 720 m³/h de biometano, suficientes para la atención de 40.000 hogares

El biogás es una de las opciones de abastecimiento térmico en la transición energética del país

EPM puso en operación la primera planta en Colombia de biometano que se genera en la digestión de lodos al tratar las aguas residuales en la planta San Fernando, para limpiarlo e inyectarlo al sistema de distribución domiciliario como un energético natural renovable.

Con la puesta en operación de esta nueva planta, que requirió una inversión aproximada de 5 millones de dólares, EPM le apunta al aprovechamiento de aproximadamente 1.200 m3/h de biogás. Con el biometano producido alcanzaría para la atención de 40.000 hogares.

Al término del evento del inicio de operación de esta infraestructura, Óscar de Jesús Hurtado Pérez, alcalde (e) de Medellín y presidente Junta Directiva de EPM, resaltó que «hoy una de las mejores empresas del Conglomerado nos entrega innovación, nos entrega satisfacción”

“Tenemos alegrías y satisfacciones como es tener a EPM que va hacia adelante, resolviendo los temas como Hidroituango. Vamos a seguir trabajando por unas mejores tarifas de servicios públicos, vamos a seguir trabajando por garantizar la energía».

Por su parte, Jorge Andrés Carrillo Cardoso, gerente general de EPM, destacó que “en nuestro país, la transición requiere una diversificación de la matriz energética con fuentes de energías renovables, para lo cual, es imprescindible un energético limpio, confiable y económicamente viable que sirva como opción para las necesidades térmicas y demandas no electrificables en el mediano plazo”.

“Como organización, le apostamos aquellas energías alternativas como el biometano que contribuyan a la calidad de vida de la gente y al cuidado ambiental”.

Esta es una solución innovadora de la empresa en el actual momento histórico a nivel mundial, en el que el gas ha sido catalogado como un energético clave que contribuye al crecimiento económico, acelera la transición energética y satisface las demandas sociales por sus bajos costos.