¿Le cuesta regresar de vacaciones? Consejos para afrontar el Síndrome Postvacacional

Si a usted también le cuesta regresar de vacaciones, entérese aquí sobre cómo afrontar el Síndrome Postvacacional.

Síndrome Postvacacional
Síndrome Postvacacional. Foto: Cortesía

El mes de diciembre, marcado por festividades y encuentros, se convierte en un oasis de bienestar para muchas personas, ofreciendo la oportunidad de desconectarse del estrés laboral y disfrutar de momentos especiales con amigos y familiares.

Sin embargo, con el inicio del nuevo año, se enfrenta el desafío de regresar a la rutina diaria, una tarea que puede resultar complicada para algunos.

El Síndrome Postvacacional, también conocido como depresión postvacacional, no está clasificado como una enfermedad en el DSM-5 (manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales), pero su impacto emocional es innegable. Diana Castañeda, docente de psicología, del Politécnico Grancolombiano, señala que «es un proceso de adaptación en el que el cuerpo y la mente deben ajustarse ante el retorno a horarios, obligaciones y rutina diaria».

Uno de los principales obstáculos es la adaptación a las responsabilidades, el aumento del ritmo diario de las actividades y la alteración del ciclo vigilia/sueño. Los síntomas, pueden durar hasta 21 días, y van desde estrés, ansiedad y rasgos depresivos, hasta fatiga, incapacidad física y mental, y un bajo estado de ánimo.

Síndrome postvacacional
Síndrome Postvacacional puede resultar muy difícil de evadir. Foto: Cortesía

Para facilitar la transición y minimizar el impacto del síndrome postvacacional, la experta trae varios consejos:

1. Realizar una planificación cuidadosa antes de que finalicen las vacaciones. “Reservar unos días para programar el regreso a las labores cotidianas, ajustar los horarios según sus necesidades individuales, mantener hábitos de alimentación saludables y realizar actividad física durante las vacaciones, son pasos cruciales”.

2. Comience por las tareas más fáciles, evitar llevar trabajo a casa, gestionar la tendencia a aplazar tareas por actividades placenteras y considerar el reencuentro con amigos y compañeros de trabajo como una parte esencial del proceso de adaptación.

3. Adoptar una mentalidad positiva y aplicar estrategias proactivas, no solo podemos enfrentar con éxito los desafíos que surgen al regresar a la rutina, sino también transformar el proceso en una oportunidad para un nuevo comienzo lleno de energía y optimismo”, aconseja la docente del Politécnico Grancolombiano.