Cómo surgió la ley seca y el efecto perverso de estas prohibiciones

Discotecas Medellín

El alcohol. La Ley Seca o prohibición de vender bebidas alcohólicas en Estados Unidos. 16 de enero de 1920. “Los humanos hemos encontrado en la naturaleza aquellas sustancias que nos han permitido abrir las puertas que llevan a rincones misteriosos, oscuros y siempre sorprendentes de nuestra propia conciencia”.

Una de esas sustancias ha sido el alcohol, venerado en algunas culturas y perseguido en otras, por considerarlo culpable de diversos males sociales. La más famosa medida contra la distribución y venta del alcohol se presentó en Estados Unidos cuando se tipificó como delito la fabricación, venta y transporte de bebidas alcohólicas, conocida como ley seca.

Un día como hoy, 16 de enero de 1920, se dictó la norma, de la que luego se arrepintió la sociedad norteamericana. Fue establecida por la Enmienda XVIII a la Constitución de Estados Unidos y fue derogada por la Enmienda XXI. Estuvo vigente entre el 17 de enero de 1920 y el 6 de diciembre de 1933. La medida conllevó el cierre de bares y tabernas para frenar la venta de bebidas embriagantes. Por prohibida, la gente no iba a abandonar esa práctica, es decir, la ley impedía la oferta, pero la demanda no había desaparecido.

El crimen organizado corrompió por miedo y por dinero a la sociedad. Los terapeutas inscritos para vender alcohol a algunos pacientes, se quedaron con los impuestos que dejó de percibir el gobierno. Había unos 30 mil bares antes de la prohibición y en pocos años, llegaron a existir más 500 mil tabernas clandestinas, donde se cometieron múltiples robos y asesinatos, millares de personas murieron o quedaron ciegas o paralíticas, por consumir alcohol de mala calidad.

Son famosas las historias de gánsters y mafiosos, quienes sacaron provecho económico y político de la prohibición y prácticas clandestinas de producción, distribución y venta ilegal de bebidas alcohólicas. Había una relación directa entre alcohol y mafia.

Esa normatividad sirvió para recordarnos que “no es la represión sino la educación y el ejercicio de la libertad, la meta de los pueblos”. (Ricardo Vera Pabón).